Blog de ISEP

‘Solo las personas maduras pueden asumir una paternidad no biológica’

 

Raimon Gaja, director de ISEP, ha publicado Volver a Empezar, un nuevo libro resultado del convenio de colaboración que ISEP Clínic mantiene con la editorial DeBolsillo.

Esta vez, Gaja ha recuperado el tema de su última publicación Con la familia bien, gracias, y vuelve a escribir para profundizar en las relaciones familiares, esta vez, en el papel de los padrastros y madrastras. Se trata de una figura socialmente llena de connotaciones negativas, sin embargo cada vez más tienen un papel destacado dentro de las nuevas familias. Gaja describe al padrastro/madrastra como un personaje principal que influye positivamente tanto en su pareja como en los hijos de esta, aprendiendo a encontrar un lugar de respeto y seguridad sin sustituir al progenitor.Hablamos con él para conocer más detalles de su última publicación.

Su última publicación con la editorial DeBolsillo, Con la familia bien, gracias habla de los distintos tipos de familia para que cada uno encuentre la suya y descubra claves para llevar mejor cenas de navidad, cumpleaños, etc. Ahora, en Volver a empezar recupera el tema de las relaciones familiares. ¿Qué le ha llevado a hablar de nuevo de la familia?
La familia tradicional ya forma parte de la historia. Están naciendo nuevas variantes de familia, y de entre ellas, parejas que aportan a la relación hijos de relaciones pasadas. Se trata de un tema actual aún poco explorado.

¿De dónde viene la mala imagen que tradicionalmente tienen los padrastros y las madrastras?
De los cuentos populares. Desde pequeños nos cuentan historias donde aparece un padrastro que abandona a sus hijos en el bosque o una madrastra que tiene envidia de la belleza de su hijastra y manda matarla. En todos los cuentos son crueles y malvados. Nos lo dicen de pequeños y nosotros nos lo creemos, lo interiorizamos. Es el saber popular el que crea este tipo de estereotipos, como el de lo brujas que son las suegras.

Entonces ¿cómo son realmente los padrastros y madrastras?
Son personas sensatas. En todo caso, hay gente de todo tipo, pero el hecho de asumir una paternidad no biológica solo permite definirla de una manera, madura. Te conviertes en el padre o madre social de los hijos de tu pareja, realizando las mismas funciones que ella.

¿Cómo debería ser la relación padrastro-hijastro?
La misma que entre padre e hijo, sin el ‘astro’ final. Esto se consigue educando conjuntamente, con los mismos valores ambos miembros de la pareja. Esto sería lo ideal.

Pero muchas veces la nueva pareja se une habiendo hijos adolescentes de por medio. ¿Pueden ser un problema?
Mejor diríamos, un motivo de discordia. Muchos hijos, al llegar a la adolescencia, han acabado con las relaciones de sus padres llevándolos al divorcio o la ruptura de relaciones entre padres-suegros. Esto solo sucede si el chico en cuestión está pasado una adolescencia mala y hay muchos mecanismos para ayudarlo a redirigir su actitud antes de llegar a estos extremos. Pero realmente esto supone un problema para la creación de nuevas familias en el caso que la pareja del padre o la madre no tenga hijos y de repente, sin tener experiencia, pase a tener un hijo adolescente. La adaptación entonces es más difícil.

¿Cómo puede ayudar el libro Volver a empezar a crear una familia mejor?
Todos los libros de autoayuda tienen un objetivo y es el de que la persona se dé cuenta que sus problemas no son únicos, que más gente los ha vivido y los vive, y que pueden continuar con sus vidas. Creemos que somos únicos aunque no es del todo cierto, por lo que se ve. Existen 60 tipos de familias diferentes según los sociólogos y la nuestra encaja dentro de una.

Los libros como Volver a empezar nos ayudarán, en este caso concreto, a reconstruir una vida en familia. Las pautas que ofrecemos en esta obra nos harán más fácil la tarea de introducirte en una familia con cimientos, de encontrar tu lugar, de comprender cuál es el nuevo papel de padre social.

¿Por qué decidió titular su nuevo libro Volver a empezar?
Hace referencia a la esencia de las nuevas familias, a personas que se dan una segunda oportunidad después de que su relación de pareja fracasara. Vuelven a empezar después de un alto en su vida, después de un cambio de neumáticos para poder seguir rodando.

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